Recetas caseras para perros (II): Puré de verduras
Hoy venimos con la 2º receta casera: puré de verduras. Y recuerda: la cocina casera es una opción para alimentar al perro, pero solo puede sustituir a las comidas comerciales (pienso y latas) cuando se elabora una dieta equilibrada, que cuente con la supervisión del veterinario o nutricionista canino.
RECETA:
Los perros son animales que, como las personas, pueden alimentarse con carne y con platos que incluyan frutas y vegetales, lo cual NO quiere decir que un perro pueda ser exclusivamente vegetariano.
Una posibilidad sencilla es cocinar un puré de lentejas, que se podrá mezclar después con el arroz. Si para cocinar las legumbres se tienen la noche anterior a remojo y se usa una olla rápida, el tiempo de elaboración no supera los 15 minutos.
Se puede utilizar tofu (una cuajada de leche de soja, que contiene proteínas de gran calidad) para completar los platos sin carne, cuando la intención es convertir estas recetas en parte de la dieta habitual del perro. Sin embargo, el tofu puede elevar el precio del plato. Y es posible prescindir de él cuando el resto de la dieta ya incluya algo de carne. En este caso, los platos de verduras suelen ser, además de una opción nutritiva para el animal, más económicos para el monedero.
Diez consejos para cocinar para el perro
1. La cocina casera es una opción para alimentar al perro, pero solo puede sustituir a las comidas comerciales (pienso y latas) cuando se elabora una dieta equilibrada, que cuente con la supervisión del veterinario o nutricionista canino.
2. Cada perro tiene unas necesidades nutritivas distintas, que no solo dependen de su peso. Por ello, no es válido obtener una dieta casera base y recalcular las cantidades necesarias en función de los kilos del can.
3. Los platos caseros permiten cocinar sin peligro para perros alérgicos o con requerimientos nutricionales especiales. Pero siempre con el visto bueno del veterinario.
4. La mayoría de las recetas caseras para el can no sirven como dieta exclusiva: en estos casos, los suplementos nutritivos comerciales -en especial los de vitamina B12, en dietas vegetarianas- son esenciales y debe prescribirlos el médico.
5. Las dietas comerciales de alta gama se elaboran con cuidado. Sus nutrientes y componentes están equilibrados para cubrir las necesidades alimentarias del perro. Para lograr lo mismo con una dieta casera, esta debe diseñarse con esmero por un nutricionista canino.
6. Los platos cocinados para el perro no deben contener un número excesivo de ingredientes: el sistema digestivo de un can no es igual que el humano. Cuatro o cinco son suficientes.
7. Los perros no admiten cambios frecuentes en la alimentación, como sí aceptamos las personas. Esto explica la importancia de elaborar una dieta sana y equilibrada, con supervisión veterinaria.
8. Para diseñar una dieta casera para el can, es esencial conocer sus necesidades alimentarias: tanto el número de calorías diarias que precisa, como la cantidad de vitaminas y otros nutrientes esenciales.
9. Hay ciertos alimentos prohibidos para el perro, que son tóxicos incluso en pequeñas cantidades. El chocolate, la cebolla, el ajo, las pasas, las uvas y el aguacate figuran entre ellos. También se debe evitar la sal y el azúcar, así como eludir la carne de cerdo cruda.
10. Las alergias alimentarias en el can no son extrañas. Cuando se diagnostican, es esencial eliminar los componentes que las producen. Y para prevenir peligros, es esencial incorporar los nuevos ingredientes de la dieta casera del perro de forma paulatina, en pequeñas cantidades.